Muchas veces soñamos tanto tener algo, con tanto deseo, con tanta ansía de tenerlo, que cuando lo tenemos ya no lo valoramos como cuando soñábamos obtenerlo.
Dejamos de valorar las cosas, las personas, los momentos con el paso del tiempo, toda la importancia que recobra cuando luchamos por tenerlo se pierde a lo largo del camino.
Quién no ha pedido a sus padres la última ''barbie'' del mercado cuando eras pequeña, y al paso de los meses cuando sale a la venta una mejor dejamos ese juguete apartado, hasta que nos olvidamos por completo de ello. Pues esto es igual, nos emperretamos con algo que nos es difícil tener, y cuando lo tenemos no lo valoramos, hacemos como si no fuera importante, como si todo aquello que soñabas ya no tienes ganas de vivirlo... Todo se convierte tan absurdo, tan irreal... que te terminas preguntando ¿para que deseas algo que vas a dejar de desear cuando lo tengas?
Yo prefiero ser apasionada, desear y seguir deseando lo que tengo... porque aún teniéndolo hay que seguir luchando para mantenerlo. Porque nada crece si no lo riegas... Es cierto que me quedan mil cosas por aprender de esta vida, pero he de decir que he vivido mucho, quizá muchas cosas que no eran acorde con mi edad, pero hay que ser fuerte y a pesar de los palos que da la vida, seguir adelante !!
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